Entrevista a Vicente Mira, consejero delegado de Aquo

 “Innovador es algo que siempre se puede vender”

Así define Vicente Mira, consejero delegado de Aquo, un innovador producto basado en tecnología hidrosoluble que está revolucionando el mercado internacional de la limpieza. Aquo es una empresa valenciana que se encuentra en pleno proceso de internacionalización con muy buenos resultados, pero el camino que ha tenido que recorrer ha sido difícil, con muchos obstáculos y falta de ayuda por parte de los organismos públicos. Todo un ejemplo de emprendedurismo e innovación que surge de la investigación para atender a una preocupación creciente por el medioambiente y el ahorro de costes.

Observatorio de los Estrategas: ¿Qué es AQUO?

Vicente Mira: AQUO es una gama de productos de limpieza envasados en film hidrosoluble, que destacan principalmente por ser más ecológicos y más económicos que otros productos con otros sistemas de envasado.
Actualmente estamos centrados en la limpieza del hogar y profesional, pero también queremos crecer hacia el sector fitosanitario y el mercado de los insecticidas.

O.E: ¿A quién va dirigido AQUO?


V.M: Se está cubriendo la demanda de la limpieza industrial, doméstica (limpiabaños, fregasuelos, limpiacristales…) y el mercado de los detergentes para la ropa.

O.E: ¿Cómo surgió la idea?

V.M: La idea surgió hace unos 8 años, empezando con la investigación de fórmulas químicas de los productos compatibles con el film hidrosoluble. Durante el proceso, uno de los imperativos de la creación fue que el producto respetara el medioambiente y fuera ecológico (una de las preocupaciones más importantes del mercado global) y el otro, que pudiera suponer un importante ahorro de costes para nuestros clientes.
Las principales ventajas de los productos de Aquo están relacionadas con estas dos ideas:

- Ahorro de espacio. El producto ocupa mucho menos espacio que otros formatos presentes en el mercado, incluyendo los recambios. La optimización del espacio es máxima tanto en los lineales de los puntos de venta como en el hogar del consumidor.
- Ahorro de agua. El producto concentrado requiere de una menor cantidad de agua, y además aporta una mayor comodidad para el usuario final en el punto de venta, ya que el producto se distribuye vacío.
- Ahorro de transporte y menor emisión de CO2 a la atmósfera. Los productos ocupan la mitad del espacio habitual debido a su concentración en monodosis, lo que reduce su peso y en consecuencia, los gastos de transporte y almacenamiento.

O.E: ¿Cuáles son las dificultades más importantes que os habéis encontrado en vuestro camino?

V.M: En primer lugar, el proceso de investigación en el que se buscaba la compatibilización entre fórmulas químicas y el film hidrosoluble. En segundo lugar, encontrar la maquinaria para la fabricación del film hidrosoluble, y diseñar la tecnología necesaria para poder llevarlo a cabo. En último lugar, dar a conocer el producto en el mercado de consumidores. La marca no puede permitirse altas inversiones en campañas en medios de comunicación masivos, por lo que se deben plantear otras fórmulas de comunicación que nos permitan llegar al público pero de forma más asequible y rentable económicamente.

O.E: ¿Cómo os veis en el futuro?

V.M: Ahora mismo estamos en plena fase de internacionalización y expansión del producto en diferentes países europeos como Italia, Inglaterra, Francia y los Países Bajos. Contamos con socios en todos ellos, incluyendo un convenio de colaboración con el Departamento de Química Industrial de la Universidad de Pisa (Italia), que nos ayuda en los procesos de testeo de nuevas fórmulas o aplicaciones del producto.

O.E: ¿Qué es para ti la innovación?

V.M: Creo que innovar es crear algo que no existe o modificar algo que ya existe, pero con criterios prácticos. Aplicándolo al terreno empresarial, además debería ser algo que se pueda comercializar y que mejore la oferta existente en el mercado, bajo criterios de competitividad.

O.E: ¿Cómo aplicáis la innovación en AQUO?

V.M: Debido al reducido tamaño de la empresa y el poco personal del que disponemos, no es posible ni rentable crear un departamento de I+D+i. Sin embargo, lo que sí hacemos es externalizar los procesos de innovación en otras organizaciones, como por ejemplo la Universidad de Pisa y otras empresas en EE.UU. que nos ayudan en la investigación y en los procesos de testeo.

O.E: ¿Cómo diagnosticarías la situación actual de la innovación en el sector empresarial?

V.M: La innovación en la Comunidad Valenciana sufre un estancamiento que se arrastra históricamente, y que no se está intentando mejorar o potenciar desde las instituciones públicas. A nivel individual, la preocupación existe, pero no existen los cauces adecuados para llevar a cabo planes de innovación en las empresas. En nuestra Comunidad se habla y se hacen muchas declaraciones de propósitos, pero no hay acciones reales para poner en práctica todos estos planteamientos sobre innovación.

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